Sanofi presentó Aprovasc®, una nueva alternativa terapéutica que combina dos medicamentos: Irbesartán y amlodipino para el manejo de la presión arterial en pacientes que no tienen su presión arterial controlada. Esta combinación ayudará a los pacientes cuya presión no logra mantenerse en los niveles normales a controlarla, así como a su adherencia al tratamiento para minimizar riesgos y futuras complicaciones, ya que en un solo medicamento encuentran dos componentes.
Aprovasc® ha demostrado controlar la presión arterial, y adicionalmente sus componentes, tanto irbesartán como amlodipino, han demostrado minimizar el daño a ciertos órganos importantes (como corazón, riñones y cerebro), cuya función puede alterarse como consecuencia de un pobre control de la presión arterial.
“Debido a la naturaleza progresiva de la hipertensión arterial, la mayoría de los pacientes hipertensos necesitarán dos o más medicamentos para controlar sus niveles de presión arterial, por lo que la terapia combinada en una sola tableta representa un beneficio para el paciente que necesita tomar más de un medicamento”, señaló la doctora Jeanid Guillén, asesora médica de la Línea Cardiovascular de Sanofi y recalcó que el tratamiento para la hipertensión arterial debe individualizarse de acuerdo a las necesidades de cada paciente.
Sobre la Hipertensión Arterial
La hipertensión arterial que es como científicamente se llama al aumento de presión arterial, es una enfermedad crónica que se caracteriza por un incremento de las cifras de presión sanguínea debido al exceso de presión ejercida por la sangre sobre las paredes de las arterias.
La presión arterial normal es aquella menor a 120/80. La primera cifra corresponde a la presión sistólica (presión arterial máxima cuando el corazón bombea la sangre hacia fuera) y la segunda cifra representa la presión diastólica (la presión cuando el corazón se llena de sangre, relajándose entre los latidos) 2. Sea que una o ambas cifras de presión arterial estén por encima del valor normal, se puede diagnosticar hipertensión arterial.
Existen pacientes que padecen “prehipertensión”, la cual se diagnostica al presentar rangos de presión arterial de 120-139mmHg (presión sistólica) y 80-89mmHg (presión diastólica), los cuales, aunque no son considerados como hipertensos por definición, están llamados a realizar cambios en su estilo de vida y a llevar un seguimiento con su médico para valorar su riesgo cardiovascular.
Regularmente, la mayoría de personas que padecen de hipertensión arterial no presentan ningún síntoma, es por ello que se le conoce como el “enemigo silencioso”, razón por la cual es tan importante consultar con un médico y revisar la presión arterial regularmente, aún más cuando existen antecedentes familiares y otras condiciones que son consideradas como “factores de riesgo”, tales como elevación de las grasas, obesidad, sedentarismo, tabaquismo, entre otras.
La prevalencia de hipertensión arterial en países de Centroamérica se ubica en el rango de 20% a 35% en la población general y representa uno de los principales factores de riesgo de cardiopatías y derrames cerebrales (enfermedad cerebrovascular), además de ser una de las principales causas de insuficiencia renal.
Es importante tener en cuenta que la hipertensión arterial no puede ser curada; sin embargo, la meta de todo paciente hipertenso es “estar controlado”, lo que significa que su presión arterial se mantenga en valores óptimos establecidos por su médico, según el riesgo cardiovascular que presente. Existe una serie de hábitos de vida que, unidos a la acción de los medicamentos antihipertensivos, podrán controlarla de forma sustancial y evitar así sus consecuencias.
Consejos para la prevención de la hipertensión y su control:
• Todo adulto debe vigilar periódicamente su presión arterial. Más aún, si sus padres o abuelos han sido hipertensos.
• Muchos hipertensos han normalizado su presión arterial al lograr su peso ideal. Evite la obesidad.
• Si su vida es sedentaria y físicamente poco activa, descubra el placer del ejercicio físico regular y, si es posible, al aire libre. Pero recuerde que siempre debe adaptarlo a sus posibilidades reales: no haga físicamente más de lo que puede y siempre consulte a su médico antes de iniciar una rutina de ejercicios.
• Disminuya el uso de sal en la preparación de sus comidas. Evite, además, los alimentos salados (enlatados, conservas, embutidos).
• Reduzca al mínimo las grasas animales de su dieta y hágala rica en verduras, legumbres, fruta y fibra.
• No fume y evite los ambientes contaminados por humo de tabaco. Invite a las personas de su entorno a dejar de fumar.
• Modere el consumo de bebidas alcohólicas. No tome más de uno o dos vasos de vino al día y, a lo sumo, una bebida alcohólica a la semana.
• No ingiera en exceso bebidas estimulantes como el café, el té, entre otras.
• Siga fielmente el tratamiento prescrito por su médico y no lo interrumpa sin el conocimiento del profesional. Observe los posibles efectos secundarios atribuibles a los fármacos y coménteselos a su médico.
• Recuerde que la hipertensión es un poderoso factor de riesgo cardiovascular que se potencia cuando se asocia a colesterol elevado, fumar, diabetes, obesidad, o inactividad física. Procure controlar, además de sus niveles de presión arterial, estos otros factores de riesgo mencionados.
Acerca Sanofi
Sanofi, un líder mundial y diversificado en el cuidado de la salud, descubre, desarrolla, y distribuye soluciones terapéuticas enfocadas en las necesidades del paciente. Sanofi tiene fortalezas claves en el campo de la salud con siete plataformas de crecimiento: soluciones de diabetes, vacunas humanas, medicamentos novedosos, enfermedades poco comunes, salud del consumidor, mercados emergentes y salud animal. Sanofi está inscrito en París (EURONEXT: SAN) y en New York (NYSE: SNY).