El Museo del Istmo Rozas-Botrán contemporáneo, es la primera institución de su género en el Siglo XXI. Se encuentra en el campus de la Universidad del Istmo, situado en el Km. 19.2, Finca Santa Isabel, municipio de Fraijanes, ciudad de Guatemala.
Este esfuerzo se enfoca en la convivencia armónica de los alumnos con una colección de arte visual de los siglos XX y XXI, perteneciente a la Colección Rozas-Botrán, para educar a través del arte, sensibilizar y fortalecer la evolución de un grupo social dentro de la universidad.
En el ámbito artístico, las piezas cuestionan el valor mismo de cada imagen, su estatus contemporáneo y su validez para debatir la realidad. Como expresó Su Santidad Juan Pablo II en la Carta a los Artistas, de 1999: “En contacto con las obras de arte, la humanidad de todos los tiempos -también la de hoy- espera ser iluminada sobre el propio rumbo y el propio destino”.
En el ámbito social, el conjunto fortalece la capacidad de las imágenes para buscar el porqué del particular ordenamiento del mundo, al mismo tiempo que destaca sus maravillas, impulsa el entendimiento de sus contradicciones y conduce a la búsqueda de soluciones para sus problemas a partir de la reflexión y la participación para el intercambio de ideas.
En el ámbito humano, además de un acopio de obras, la colección es un conjunto de nombres y trayectorias. Su origen le da un valor de vida que tiene la facultad de sensibilizar a través del arte y en la UNIS, adquiere una función educativa al ser conocida, estudiada y apreciada de manera integral.
El Rector de la UNIS, Manuel Pérez y Jose Rozas-Botrán, Presidente de Fundación Rozas-Botrán, anuncian las principales funciones del museo, que son: la educativa, la social, la lúdica y la recreativa. Y añaden que la investigación, la preservación y la organización forman el sistema basal de esta nueva propuesta cultural. Entre las obras seleccionadas se encuentran piezas de Ramón Ávila, Marco Augusto Quiroa, Rudy Cotton, Patricia Valladares y Tache Ayala, Valenz y Mod Cárdenas.
Son piezas “Entre Siglos”, que van desde la nueva figuración a las distintas formas de arte abstracto para culminar con foto-arte y grafiti. La trama museográfica se ha establecido a partir de la coherencia del conjunto y de las tendencias visibles que lo unen por medio de una narración fundamentada en la búsqueda del diálogo entre obras y espectadores.
Este esfuerzo se enfoca en la convivencia armónica de los alumnos con una colección de arte visual de los siglos XX y XXI, perteneciente a la Colección Rozas-Botrán, para educar a través del arte, sensibilizar y fortalecer la evolución de un grupo social dentro de la universidad.
En el ámbito artístico, las piezas cuestionan el valor mismo de cada imagen, su estatus contemporáneo y su validez para debatir la realidad. Como expresó Su Santidad Juan Pablo II en la Carta a los Artistas, de 1999: “En contacto con las obras de arte, la humanidad de todos los tiempos -también la de hoy- espera ser iluminada sobre el propio rumbo y el propio destino”.
En el ámbito social, el conjunto fortalece la capacidad de las imágenes para buscar el porqué del particular ordenamiento del mundo, al mismo tiempo que destaca sus maravillas, impulsa el entendimiento de sus contradicciones y conduce a la búsqueda de soluciones para sus problemas a partir de la reflexión y la participación para el intercambio de ideas.
En el ámbito humano, además de un acopio de obras, la colección es un conjunto de nombres y trayectorias. Su origen le da un valor de vida que tiene la facultad de sensibilizar a través del arte y en la UNIS, adquiere una función educativa al ser conocida, estudiada y apreciada de manera integral.
El Rector de la UNIS, Manuel Pérez y Jose Rozas-Botrán, Presidente de Fundación Rozas-Botrán, anuncian las principales funciones del museo, que son: la educativa, la social, la lúdica y la recreativa. Y añaden que la investigación, la preservación y la organización forman el sistema basal de esta nueva propuesta cultural. Entre las obras seleccionadas se encuentran piezas de Ramón Ávila, Marco Augusto Quiroa, Rudy Cotton, Patricia Valladares y Tache Ayala, Valenz y Mod Cárdenas.
Son piezas “Entre Siglos”, que van desde la nueva figuración a las distintas formas de arte abstracto para culminar con foto-arte y grafiti. La trama museográfica se ha establecido a partir de la coherencia del conjunto y de las tendencias visibles que lo unen por medio de una narración fundamentada en la búsqueda del diálogo entre obras y espectadores.