Pepo Toledo inauguró su escultura Ángel de la Paz en el Palais de Nations de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra el 9 de noviembre de 2015. La ceremonia de donación se hizo con ocasión del 20 aniversario de los Acuerdos de Paz en Guatemala y la Semana de la Paz en Ginebra.
Inauguraron el acto Michael Moller, Director de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra y Carla Rodríguez Mancia, Embajadora y Representante Permanente de Guatemala ante la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra, en presencia de Carlos Raúl Morales Moscoso, Ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala y Leticia Teleguario Sincal, Minstra de Trabajo y Previsión Social de Guatemala. El evento fue apoyado por la Fundación Mario Monteforte Toledo. Pepo Toledo pronunció el siguiente discurso:
“La Paz Nace en Nuestro Interior. La paz es algo que no agradecemos y no apreciamos hasta que la perdemos, como muchas otras cosas que Dios nos da. Hoy le doy gracias por esta tarde. La ausencia de violencia no necesariamente es una paz verdadera. Para los países que emergen de la guerra no hay paz sin perdón. Los conflictos deben ser resueltos construyendo y no destruyendo, avanzando y no retrocediendo, unidos y no en discordia. Un antiguo refrán dice que el perdón no puede cambiar el pasado pero sí el futuro. Isaac Newton señaló que “los hombres construimos demasiados muros y no suficientes puentes”.
Es en nuestro interior donde nacen la paz y la guerra. Es allí donde debemos construir los pilares de la paz y fundar sobre ellos nuestros hogares. El mayor tesoro que podemos tener es un hogar que vive en armonía. A partir de allí es que podemos crear la paz mundial. La paz no es una utopía. Es un sueño realizable.
Solamente con una actitud positiva podemos fundar la estructura de una paz duradera, basada en la verdad, el amor, la equidad, la justicia, la libertad y la solidaridad. Las sociedades que así lo hacen desarrollan un nivel de tolerancia que les permite enfrentar unidos desastres naturales, económicos y de todo tipo. Cuando la paz florece lo hace también el potencial humano.
Heródoto de Halicarnaso decía que “sólo un tonto puede desear la guerra, y no la paz; pues en la paz los hijos llevan a sus padres a la tumba; en la guerra son los padres quienes llevan a sus hijos a la tumba”. El Ángel de la paz es una ofrenda de bendición que hago en nombre de Guatemala. Debe llegar a la mayor cantidad posible de ciudades en el mundo.”
El primer Ángel de la Paz fue presentado el 19 de octubre de 2012 en la Feria del libro Zócalo del Centro Histórico de la Ciudad de México y luego pasó a formar parte del proyecto cultural Circuito de las Naciones en las inmediaciones del aeropuerto de la Ciudad de México. El segundo Ángel de la Paz fue inaugurado el 6 de diciembre de 2012 en la Plaza de la Concordia, del Archivo Histórico de la Policía Nacional, Ciudad de Guatemala. El tercer Ángel de la Paz fue inaugurado en el jardín de esculturas del Museo de las Américas de la Organización de Estados Americanos en Washington D.C. el 14 de mayo de 2014. El cuarto Ángel de la Paz fue inaugurado el 21 de junio de 2015 en Erlangen, Bavaria, Alemania. El quinto, como ya dijimos, en el Palais de Nations de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra.
El sexto Ángel de la Paz ya está listo. Se planea instalarlo definitivamente en el Centro Histórico el 29 de diciembre de 1996, día de la firma de los Acuerdos de Paz en Guatemala. Mientras tanto, ha participado en diferentes exposiciones temporales en la Ciudad de Guatemala: Momento de Ángeles, Templo Santo Domingo de Guzmán, 3 de noviembre de 2015. Evento Soñé Futuro organizado por Saúl Méndez en el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, 29 de noviembre de 2015. Ahora está en la Escuela Nacional de Ares Plásticas (ENAP), donde puede ser apreciado mientras se instala definitivamente a fin de año.
El Ángel de la Paz es un proyecto escultórico global del artista guatemalteco Pepo Toledo. Específicamente, una ofrenda de bendición que hace en nombre de Guatemala. Es una escultura monumental que nace con la serie Ángeles, que inauguró el 27 de diciembre de 2012 en La Galería de Fundación Rozas Botrán en honor a su entrañable amigo el maestro Efraín Recinos, por cumplirse un año de su muerte. Pepo está empeñado en que esta escultura llegue a la mayor cantidad posible de ciudades del mundo.
Inauguraron el acto Michael Moller, Director de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra y Carla Rodríguez Mancia, Embajadora y Representante Permanente de Guatemala ante la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra, en presencia de Carlos Raúl Morales Moscoso, Ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala y Leticia Teleguario Sincal, Minstra de Trabajo y Previsión Social de Guatemala. El evento fue apoyado por la Fundación Mario Monteforte Toledo. Pepo Toledo pronunció el siguiente discurso:
“La Paz Nace en Nuestro Interior. La paz es algo que no agradecemos y no apreciamos hasta que la perdemos, como muchas otras cosas que Dios nos da. Hoy le doy gracias por esta tarde. La ausencia de violencia no necesariamente es una paz verdadera. Para los países que emergen de la guerra no hay paz sin perdón. Los conflictos deben ser resueltos construyendo y no destruyendo, avanzando y no retrocediendo, unidos y no en discordia. Un antiguo refrán dice que el perdón no puede cambiar el pasado pero sí el futuro. Isaac Newton señaló que “los hombres construimos demasiados muros y no suficientes puentes”.
Es en nuestro interior donde nacen la paz y la guerra. Es allí donde debemos construir los pilares de la paz y fundar sobre ellos nuestros hogares. El mayor tesoro que podemos tener es un hogar que vive en armonía. A partir de allí es que podemos crear la paz mundial. La paz no es una utopía. Es un sueño realizable.
Solamente con una actitud positiva podemos fundar la estructura de una paz duradera, basada en la verdad, el amor, la equidad, la justicia, la libertad y la solidaridad. Las sociedades que así lo hacen desarrollan un nivel de tolerancia que les permite enfrentar unidos desastres naturales, económicos y de todo tipo. Cuando la paz florece lo hace también el potencial humano.
Heródoto de Halicarnaso decía que “sólo un tonto puede desear la guerra, y no la paz; pues en la paz los hijos llevan a sus padres a la tumba; en la guerra son los padres quienes llevan a sus hijos a la tumba”. El Ángel de la paz es una ofrenda de bendición que hago en nombre de Guatemala. Debe llegar a la mayor cantidad posible de ciudades en el mundo.”
El primer Ángel de la Paz fue presentado el 19 de octubre de 2012 en la Feria del libro Zócalo del Centro Histórico de la Ciudad de México y luego pasó a formar parte del proyecto cultural Circuito de las Naciones en las inmediaciones del aeropuerto de la Ciudad de México. El segundo Ángel de la Paz fue inaugurado el 6 de diciembre de 2012 en la Plaza de la Concordia, del Archivo Histórico de la Policía Nacional, Ciudad de Guatemala. El tercer Ángel de la Paz fue inaugurado en el jardín de esculturas del Museo de las Américas de la Organización de Estados Americanos en Washington D.C. el 14 de mayo de 2014. El cuarto Ángel de la Paz fue inaugurado el 21 de junio de 2015 en Erlangen, Bavaria, Alemania. El quinto, como ya dijimos, en el Palais de Nations de la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra.
El sexto Ángel de la Paz ya está listo. Se planea instalarlo definitivamente en el Centro Histórico el 29 de diciembre de 1996, día de la firma de los Acuerdos de Paz en Guatemala. Mientras tanto, ha participado en diferentes exposiciones temporales en la Ciudad de Guatemala: Momento de Ángeles, Templo Santo Domingo de Guzmán, 3 de noviembre de 2015. Evento Soñé Futuro organizado por Saúl Méndez en el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, 29 de noviembre de 2015. Ahora está en la Escuela Nacional de Ares Plásticas (ENAP), donde puede ser apreciado mientras se instala definitivamente a fin de año.
El Ángel de la Paz es un proyecto escultórico global del artista guatemalteco Pepo Toledo. Específicamente, una ofrenda de bendición que hace en nombre de Guatemala. Es una escultura monumental que nace con la serie Ángeles, que inauguró el 27 de diciembre de 2012 en La Galería de Fundación Rozas Botrán en honor a su entrañable amigo el maestro Efraín Recinos, por cumplirse un año de su muerte. Pepo está empeñado en que esta escultura llegue a la mayor cantidad posible de ciudades del mundo.